La jubilación y la pensiones son un tema de discute muy recurrente en España, donde, a pesar de todo, reina el optimismo de cara al retiro laboral. Así lo comprueban los resultados de una encuesta efectuada por la Organización de Usuarios y Usuarios (OCU) a más de mil quinientos personas de entre veinticinco y ochenta años para conocer las esperanzas de las personas que no se han retirado y los consejos de quienes ya lo han hecho.
Aunque es verdad que un treinta y cinco por ciento de los encuestados estiman que la prestación no les dejará llegar a fin de mes, un cuarenta y dos por ciento sí que piensa que les va a bastar, al tiempo que otro siete por ciento considera que va a ser «más que suficiente». Podemos destacar que la mayor parte de participantes de este estudio son conscientes que padecerán un ‘tijeretazo’ notable a sus ingresos una vez dejen de trabajar (un doce por ciento piensa que se reducirá a menos de la mitad), si bien son pocos los que se han puesto en marcha para encarar dicha situación. En verdad, 7 de cada diez personas reconocen no estar preparando financieramente su jubilación.
El motivo tras esta inactividad se halla en que los encuestados dan prioridad a otros gastos más inmediatos, no tienen ganancias suficientes para ahorrar o por puro desconocimiento sobre el funcionamiento de las pensiones públicas.
Pérdidas de los retirados
Conforme recoge el informe publicado por la OCU, la diferencia entre los ingresos del último salario y la pensión de las personas retiradas alcanza los cuatrocientos euros. Por tal razón, un diez por ciento opta por diversificar sus fuentes de ingresos por medio de otras vías como el alquiler de propiedades u otras inversiones. De forma contraria, el noventa por ciento sobrante se sosten únicamente con dicha prestación.
Ahorrar y diversificar
Por esta razón, desde la organización aconsejan a las familias «ahorrar e la medida de lo posible, mas sin dejar dormir entonces el dinero en un depósito o cometer el fallo de jugárselo todo a una carta«. En otras palabras, la OCU subscribe que no se debe destinar todo solo a un plan de pensiones privado, sino resulta conveniente valorar otras alternativas. «Aunque el presente sistema de pensiones es parcialmente desprendido, puede no serlo tanto con el paso del tiempo», concluyen.