La Organización de Usuarios y Usuarios (OCU) ha lanzado una advertencia a la población retirada alertándoles de que aumentan las entidades que cobran comisiones de hasta cien euros en las cuentas bancarias de personas retiradas a cargo de la realización de trámites rutinarios, como efectuar una operación presencialmente en la oficina.
La entidad ha recurrido al caso práctico de un retirado que tenga una pensión domiciliada de por lo menos novecientos euros al mes, retire cuatrocientos euros mensualmente y realice trasferencias por importes de unos trescientos euros, todo ello presencialmente, en ventana. La OCUcompleta la exposición del caso narrando lo que cobran entidades como Banco Sabadell, Banco Bilbao Vizcaya Argentaria y Bankinter, que penalizan al cliente del servicio retirado con cobros de ciento cuatro, noventa y seis y setenta y ocho euros, respectivamente con carácter anual.
La tarjeta asimismo acarrea un costo para los pensionistas, conforme narra la OCU, que cita a Bankinter y los treinta euros que cobra por la Cuenta Pensión, al tiempo que Ibercaja cobra veintiocho euros por su Cuenta Pensión, y Globalcaja, dieciocho euros, exactamente la misma cifra que CajaMar (salvo usuarios que ingresen cuando menos mil treinta y siete euros, en esta última entidad).
El informe asimismo incluye los cobros por el mantenimiento de la cuenta corriente: Banco Sabadell cobra ochenta euros anuales si se domicilian recibos y la pensión, al paso que Ibercaja cobra doce euros a quienes contraten el Plan Tú Escoges de Globalcaja si se domicilia la pensión y las compras efectuadas con tarjeta.
En lo que se refiere a la retirada de efectivo en ventana, la OCU recurre a los ejemplos del Banco Bilbao Vizcaya Argentaria, que cobra dos euros para retiradas de menos de dos.000 euros, de la misma manera que CaixaBank, aunque en un caso así si las personas son mayores de sesenta y cinco años pueden realizar esta operación 5 veces al mes sin coste.