La seguridad es uno de los conceptos más relevantes cuando equipamos un espacio comercial, habiendo de estipular todos aquellos parámetros de prevención que van a garantizar que el lugar queda exento de los principales riesgos; tal y como es el caso de los incendios. Por otro lado, la eficiencia corporativa es otro de los aspectos que deben adquirir presencia en la gestión de un negocio, velando por la productividad en aras de impactar adecuadamente en el mercado actual. Si alcanzamos la excelencia en estos dos factores, las probabilidades de éxito de nuestra empresa aumentan de manera significativa.
Sistemas de prevención contra incendios
Sufrir un incendio es un riesgo que asumimos diariamente, muchas veces sin tan siquiera percatarnos de ello. Por lo tanto, se antoja imperativo estudiar qué medidas podemos tomar en aras de proteger nuestros espacios y anticiparnos a un incidente de estas características. En este orden de ideas, las bocas de incendio equipadas se presentan como el principal recurso y, puesto que todo local comercial ha de cumplir con ciertas normativas, resulta crucial conocer en qué consisten exactamente estos equipos y cómo hemos de ejercer su respectivo mantenimiento para mantenerlos siempre operativos.
Las bocas de incendio equipadas están compuestas por seis elementos y todos ellos deben funcionar bajo su máximo rendimiento, asegurando que, en caso de que aparezca un fuego en el lugar, podamos actuar con absoluta inmediatez. El armario es el espacio en el que guardamos la BIE y su ubicación debe estar correctamente señalizada. El segundo componente es el carrete, donde se coloca el tercero: la manguera. La manguera tiene una longitud de 20 metros y, en su extremo, se encuentra la boquilla, con la que controlamos la salida del agua. La válvula, por su parte, nos sirve para conectar la BIE con la toma de agua; mientras que la válvula nos permite gestionar la presión.
En cuanto al mantenimiento de estos equipos, la normativa vigente se recoge en el Real Decreto 513/2017 y el Real Decreto 2267/2004. De esta manera, se nos obliga a realizar tres mantenimientos: uno trimestral, uno anual y otro cada cinco años. En cada uno de estos procedimientos, se estudia con detenimiento el estado de la BIE en aras de corregir aquellas problemáticas que podrían evitar su desempeño. Hablamos de una medida esencial con la que, de una forma o de otra, establecemos la protección de nuestra empresa ante los riesgos más drásticos.
Asesorías especializadas para revitalizar el negocio
Junto a la seguridad del local, es prioritario establecer una dinámica comercial de plena eficiencia. Una serie de pautas que garantizan el correcto impacto dentro del mercado y que podemos ejercer con absoluta diligencia si nos ponemos en manos de asesorías especializadas. Este es el caso de Chef Ejecutivo, una asesoría hostelería destinada a revitalizar restaurantes y bares para aumentar el rendimiento, las ventas y adaptarlos a las nuevas exigencias del paradigma online.
Chef Ejecutivo nos tiende la mano desde el primer momento, analizando en detalle nuestro potencial y planificando una estrategia con la que nos alzaremos como referentes de nuestro propio sector. A su vez, ayuda a todas aquellas empresas que llevan años en el mundo de la hostelería, pero nunca han llegado a triunfar. Elaboran una carta interesante con la que despertar la atención de los paladares más exigentes, estableciendo también todas las medidas de marketing correspondientes. De esta forma, revitalizamos el negocio y aseguramos que vamos a estar operando bajo nuestro máximo rendimiento, disparando paulatinamente las ventas y, con ellas, el volumen de ingresos.Cuando hacemos referencia al marketing, no solo hablamos de la publicidad presencial y online que se lleva a cabo. La identidad corporativa es una cuestión vital y desde Chef Ejecutivo adecuan la decoración del local para que demos la mejor imagen posible. Una serie de servicios de alto valor que, junto a los cursos que imparte la asesoría, nos mantendrán en primera línea de mercado para que seamos capaces de vivir de la hostelería; algo verdaderamente complejo en los tiempos que corren.