Francina Armengol se convierte en la nueva presidenta del Congreso y promete una España plural
En un sorpresivo giro de eventos, Francina Armengol, hasta hace poco presidenta de Baleares, se ha asegurado la posición de presidenta del Congreso gracias a un acuerdo de última hora entre el PSOE y Junts. En su discurso inaugural, Armengol ha anunciado que a partir de ahora se permitirá el uso de las lenguas cooficiales del Estado en el Congreso, citando al poeta catalán Salvador Espriu en catalán con estas palabras: «Recorda sempre això, Sepharad. Fes que siguin segurs els ponts del diàleg i mira de comprendre i estimar les raons i les parles diverses dels teus fills» (Recuerda siempre esto, Sepharad, haz que sean seguros los puentes del diálogo y trata de comprender y amar las diversas razones y hablas de tus hijos).
Un compromiso con la diversidad lingüística
Armengol ha dejado claro que su presidencia se enfocará en preservar y respetar la diversidad lingüística de España. En sus propias palabras: «Quiero manifestar mi compromiso con el castellano, el catalán, el euskera y el gallego y la riqueza lingüística que suponen. Quiero anunciarles que esta Presidencia permitirá la utilización de todos esos idiomas en el Congreso desde esta sesión constitutiva». Además, ha destacado la importancia de esta diversidad en la democracia parlamentaria y ha citado a Espriu nuevamente: «Esta escucha de la diversidad, Salvador Espriu la expresó como nadie en uno de sus poemas».
Construyendo una España representativa
Armengol ha hecho un llamado a todos los diputados para construir espacios de diálogo y entendimiento en el Congreso, con el fin de reflejar la España real y asegurar que sea conocida y reconocida adecuadamente. En sus palabras: «Les invito a construir entre todos los espacios para que esta España real se vea representasda en esta Cámara, que esta España real se conozca y se reconozca mejor desde la escucha y el diálogo».
Un nuevo rumbo para el Congreso
Con la elección de Francina Armengol como presidenta del Congreso, se espera un cambio significativo en la forma en que se abordan los temas y se toman las decisiones en la Cámara Baja. Su compromiso con la diversidad lingüística y su llamado a construir una España representativa son señales claras de que se busca un nuevo rumbo. Solo el tiempo dirá cómo esto impactará en el desarrollo y la dirección del país.